Perícles resucita en Atenas

Después de casi diez años al fin la ciudad de Atenas tiene un museo casi digno de la urbe que la rodea tanto la clásica como la moderna. Acogerá las maravillas del arte clásico de esa parte del viejo mare nostrum sobre todo las reliquias de incalculable valor del arte helénico. Si tardaron mas es porque como en toda ciudad tan antigua como el hambre, siempre hay algo debajo dejando en suspenso la continuación inmediata de la construcción del museo. Pero aquí esta dispuesto a abrir sus puertas y rebelarnos como era la Grecia clásica entre otras cosas o como era el Partenón, su interior sus frescos... no perdón los frescos no y ahora hablare de eso. Dejemos aparte que en el siglo XVII usaran el Partenón como polvorín en una guerra y saltara por los aires llevandose por delante parte del techo entre otras cosas, pero en el siglo XIX concretamente un embajador británico llamado Elgin, con consulado en Constantinopla, decidió quitar la mayor parte de la decoración escultórica del monumento (frisos, metopas, frontones) y trasladarla a Inglaterra para venderla al Museo Británico, en donde todavía se exhibe, siendo una de las colecciones más significativas del museo en la actualidad. Es normal que Grecia reclame su patrimonio, saqueado ilegalmente usando una excusa, porque se vaya a la mierda o no el sitio donde estaban esos frisos era y es Grecia, siendo a el al que deben volver, es una cuestión de lavado de moral... aunque claro, si saquearon otros países y hubo que echarlos por la fuerza, como van a devolver unos frisos saqueados y estando en un país con unas leyes ambiguas en lo que a reliquias y antigüedades se refiere.

La arquitectura del nuevo museo, en todo caso trata de emular al tesoro perdido aunque con un juego de luces verdaderamente espectacular, solo falta que algún día esas luminarias, resplandezcan aun mas con el brillo de esos maravillosos frisos que una vez decoraron el Partenón.

Artículo publicado en mi viejo blog: 21/06/2009